Te responderán los besos
que rondando la sala están.
Los susurros que escondidos
en los oídos de tus hijas
por decir te amo desesperan;
las caricias que en mis manos
pero que no muestran prisa
pues te quieren esperar.
Preguntas cuánto lo hice...
Mira en el cielo las estrellas
y la arena toda del mar.
Cuenta la oruga y la hormiga,
piensa en la extensión de la vida
y aún esto no bastará.
Te extrañé...
Porque me falta tu risa,
anhela mi ser tus caricias,
tu aire deseo respirar.
Porque te necesita mi vida
y entiendo que no existiría
sin ti... mi otra mitad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario